Me gustan las tormentas, sentir y admirar la Naturaleza desatada, y especialmente cuando el viento cambia y también a mi Vida llegan aires nuevos y quizá inciertos.
Regresaba de un largo viaje y la tormenta anunciada esperaba delante, mientras la atravesaba conduciendo disfrutaba de ella, y no pude evitar detenerme. Dejé el coche en un lugar seguro, no pude buscar el encuadre perfecto, el viento me golpeaba con fuerza y era inútil usar el paraguas. Hice una única toma.
Seguramente no recoge todo lo que pude sentir en aquel momento, como tantas otras veces una imagen tiene valor a los ojos de su autor en cuanto que le ayuda a recrear el instante vivido. Aunque de alguna forma se muestra el impulso vital que cíclicamente despierta. Toda tormenta debe traer su calma.
Justamente as reflejado en esta toma todo lo que cuentas,muy buena!!
ResponderEliminarSaludos
Muchas gracias por tu comentario. Me alegro de que te guste la imagen, y de haber logrado transmitir parte de aquel momento.
EliminarSaludos