martes, 24 de abril de 2012

Miradas...

Antes y después....

En los lugares hermosos es más fácil hacer una buena foto, pero lamentablemente muchos no están al alcance de cualquiera, o no lo están tan frecuentemente como desearíamos. Ya es un tema que he comentado algunas veces con un viejo amigo. Pero también es cierto que en los lugares cercanos, y no tan espectaculares, se aprende mucho más, se aprende a encontrar los mínimos detalles que pueden llegar a justificar una salida, se educa la mirada.

Tengo la suerte de vivir a escasos metros de un río, pero también la desgracia de que siendo tan hermoso en su nacimiento el "desarrollo" provocado por el Hombre hace que cuando me pasa cerca lo hace en un entorno tremendamente degradado, ha perdido gran parte de su encanto en su viaje.

Pero no me resisto a visitarlo, para, al menos, no olvidar en periodos largos de inactividad cómo se tomaba una imagen.

Me llevó poco tiempo localizar de nuevo alguno de los escasos lugares que pueden revestir interés y además son accesibles sin demasiada vestimenta específica. Pensé de qué forma mi mente ya sabía qué imagen quería crear, pero esta vez quise también atrapar la base de la que disponía:




Encontrada ya la materia base extraje el filtro de 10 pasos que iba a posibilitar la transformación de la realidad en otra realidad buscada, y quizá más hermosa. Tras varios ajustes y lógico procesado posterior esta es la única imagen que se muestra habitualmente:




Quizá antes cuando afirmé que en lugares hermosos es más fácil hacer una buena foto dejé escapar a propósito la verdadera realidad. Porque lo difícil es no hacer únicamente la postal, sino algo más...

El tema da para mucho.

lunes, 2 de abril de 2012

Turbulencias




Tras la tempestad siempre antes o después llega la calma. Unos cuantos kilómetros de costa y un par de meses separan estas dos imágenes. El momento vital muy parecido, necesidad de dejar la mirada libre y tratar de recoger la pequeña belleza que pueda encontrar.